Liga de Campeones

Liga de Campeones | El Sevilla noquea al Krasnodar sobre la bocina

Los andaluces cuajaron una primera mitad fantástica, pero acusaron en demasía el bajón de rendimiento en los compases iniciales del segundo acto. Ivan Rakitic firmaría un tanto magnífico, Wanderson nivelaría las fuerzas y Munir El Haddadi le daría el billete directo hacia los octavos de final.

Por Pedro Parra
4 min.
Lucas Ocampos, clave en el Sevilla de Julen Lopetegui @Maxppp

Después de la remontada contra el Celta de Vigo en la décima jornada de la máxima categoría del deporte rey en España, el Sevilla, flamante ganador de la Europa League, afrontaba la cuarta cita de la fase de grupos de la Liga de Campeones 2020-2021. Para ello, se desplazaba a Rusia con el firme propósito de obtener los tres puntos en el fortín del Krasnodar.

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Cabe recordar que los locales le plantaron cara a la entidad de Nervión en el duelo disputado en tierras andaluzas, dado que los de Julen Lopetegui se vieron en la obligación de voltear la tortilla al estar en clara desventaja en el primer acto (dos dianas por debajo). Sin embargo, la cita en Krasnodar arrancaría de manera fantástica para los hispalenses gracias a Ivan Rakitic, quien materializaría una diana de muy bella factura con un golpeo de balón extraordinario (0 – 1).

Jules Koundé, quien ya ha reconocido que conversó con Pep Guardiola (míster del Manchester City) durante la pasada ventana de transferencias, probaría fortuna tras un contragolpe liderado por Lucas Ocampos. El argentino, con motivo de la ausencia de Jesús Navas por sanción, se encargaría de ocupar todo el costado diestro de un Sevilla que estaba ofreciendo una excelente propuesta en Rusia.

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El Sevilla domina en el primer tiempo

Munir El Haddadi, bastante participativo desde el pitido inicial del trencilla, no conseguiría atinar con su definición, pese a una sensacional triangulación colectiva de los suyos. El jugador criado en las categorías del FC Barcelona dispondría de otra ocasión antes del descanso, al igual que un Diego Carlos que no consiguió conectar adecuadamente el cuero tras el movimiento de Óscar Rodríguez.

La única acción con cierta sensación de peligro de los locales llegaría por un error del Sevilla, aunque las tornas se cambiaron al regresar del túnel de vestuarios. Los rusos comenzaron a asediar las inmediaciones del área custodiada por Tomás Vaclík, siendo Koundé providencial para cubrir las carencias de un Nemanja Gudelj que no podía desempeñarse en su demarcación natural.

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El Krasnodar despierta de su letargo

Es más, el Krasnodar se acabaría topando con la madera en dicha acción, respirando aliviado un Lopetegui que, como es lógico, no estaba para nada satisfecho con el guion de los compases iniciales del segundo acto de la batalla. Julen movería ficha con la entrada al césped de Joan Jordán, quien intentaría dar algo más de estabilidad a la medular hispalense al ocupar la plaza de Óscar.

Ocampos continuaba a lo suyo, haciendo gala de su verticalidad y profundidad como carrilero diestro, haciendo "olvidar" (salvando las distancias) a un Navas que, además de eterno capitán, sigue siendo imprescindible para el seis veces ganador de la Europa League. Luuk de Jong tendría en sus botas la sentencia, pero su chut se marcharía por encima del travesaño. A continuación, el Krasnodar devolvería la paridad al luminoso, pese a los esfuerzos de Koundé por evitar el gol, por medio de la diana convertida por Wanderson (1 – 1).

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Munir obtiene su premio

Por si fuera poco, Lopetegui sufriría un contratiempo en forma de lesión con Sergio Escudero, quien se retiraría del tapete verde con claros síntomas de dolor en su codo. El lateral zurdo sería reemplazado por Karim Rekik, al tiempo que Óliver Torres y Youssef En-Nesyri sustituirían a Rakitic y De Jong, respectivamente. Sin duda, las decisiones de Julen desde el banquillo fueron más que acertadas.

El Sevilla mejoraría claramente sus prestaciones en el césped, recordando a la imagen desplegado a lo largo del acto inaugural. Sin embargo, se estrellaría continuamente con el muro de un plantel ruso que, seguramente, veía con muy buenos ojos el reparto de puntos en Krasnodar. Munir haría lo indecible para guiar a los andaluces hacia el triunfo, mientras que En-Nesyri y Oussama Idrissi (dio refresco a Ocampos) dejaron destellos de calidad en las postrimerías del envite. Cuando el duelo casi agonizaba, emergería la figura de Munir para firmar el decisivo 1 – 2 y sellar la clasificación para octavos de la entidad del sur de nuestro país.

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