Campeonato de Europa

Eurocopa | La República Checa sorprende a Países Bajos y avanza a cuartos

El combinado dirigido por Jaroslav Silhavy ha protagonizado la primera gran sorpresa de los cruces del torneo. Los goles de Tomás Holes y Patrik Schick conducen a los checos hacia la siguiente ronda, donde se han citado con Dinamarca. En cuanto a los neerlandeses, se quedarían en inferioridad numérica por la expulsión de Matthijs de Ligt.

Por Pedro Parra
3 min.
Matthijs de Ligt, en acción con Países Bajos ante la República Checa @Maxppp

Duelo de poder a poder con motivo de la celebración de los octavos de final de una Eurocopa que defiende Portugal. Países Bajos, que ha dejado vibraciones realmente positivas a lo largo de la fase de grupos, confiaba en prolongar su travesía en la competición del Viejo Continente. Para ello, los neerlandeses se verían en la obligación de superar el reto de la República Checa. Una cita que, dicho sea de paso, iba a tener lugar en el Estadio Ferenc Puskás de Budapest.

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Donyell Malen trataría de mostrar su profundidad y su dinamismo en el juego casi desde el pitido inicial del colegiado. Sin embargo, Denzel Dumfries, una de las sensaciones de la competición, no conseguiría alcanzar el envío de un ariete que se ha abierto paso en los planes del Liverpool. Poco después, los neerlandeses disfrutarían de una doble oportunidad en las botas de Matthijs de Ligt y Memphis Depay. Aun así, la acción quedaría invalidada por posición antirreglamentaria.

Daley Blind también probaría fortuna por el flanco izquierdo del ataque de los de Frank de Boer, una demarcación por la que se incrustaría instantes más tarde el bueno de Dumfries. Todo ello, claro está, con la firme intención de pillar desprevenido a su adversario, dado que suele desenvolverse por el costado diestro de Países Bajos. La réplica de los checos correría a cargo de Tomás Soucek, si bien es cierto que no sería capaz de ver puerta.

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Intercambio de golpes en Budapest

Asimismo, Maarten Stekelenburg se vería en la obligación de intervenir para echar el cerrojo a sus dominios. Con el transcurso de los minutos, los pupilos preparados por Jaroslav Silhavy fueron ganando presencia sobre el tapete verde. Y, evidentemente, empezaron a generar cierta sensación de peligro para inquietar al combinado neerlandés. Es más, De Ligt estaría providencial para evitar que el disparo de Antonín Barák, previo envío de Lukás Masopust, rompiese la paridad en el luminoso.

Por su parte, Tomás Vaclík, quien ya se ha despedido del Sevilla, estaría realmente atento para evitar que el centro filtrado por Dumfries llegase a buen puerto. En cuanto a Memphis Depay, que estaba menos activo de lo que viene siendo habitual en esta Euro, conectaría con un Patrick van Aanholt que no lograría definir con precisión. A lo que conviene agregar que Vaclík realizaría una parada fantástica, ganándole la partida a un Malen que se quedaría a un paso de convertir una obra de arte.

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La expulsión de De Ligt

Eso sí, la jugada que marcaría el devenir de la contienda en el segundo tiempo se produciría al poco de volver del túnel de vestuarios. Tras consultar la acción en el VAR, el trencilla tomaría la decisión de expulsar (roja directa por mano) a un Matthijs de Ligt que estaba dando una exhibición en defensa. Dumfries, de lo mejor de los suyos, reaccionaría justo a tiempo para sostener a las tropas de De Boer cuando Stekelenburg se encontraba batido.

Rebasado el ecuador de los segundos 45 minutos del compromiso, una acción de estrategia sería resuelta a las mil maravillas por Tomás Holes para enmudecer a la parroquia neerlandesa (0 – 1). Y el júbilo de la hinchada checa sería aún mayor en las postrimerías del envite, una vez que Patrik Schick transformaría su cuarta diana en lo que va de entorchado (0 – 2). Por tanto, la República Checa noquea a Países Bajos y se enfrentará contra Dinamarca en cuartos de final.

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