Liga | El Atlético de Madrid cabalga a lomos de Marcos Llorente

Tras una racha inmaculada de resultados en Liga, especialmente en este 2021, el empate del Atlético de Madrid hace unos días ante el Celta de Vigo hizo aparecer las primeras dudas. Aunque los rojiblancos todavía tienen un margen importante ante sus perseguidores, el duelo de hoy ante el Granada cobraba más importancia. Una plaza complicada la del Estadio Los Cármenes, con un equipo nazarí tan aplicado como los de Diego Simeone tácticamente.

Lo que dio como resultado una primera parte donde las defensas de ambas escuadras tuvieron que emplearse a fondo. Ángel Correa comenzó avisando para los visitantes, con un remate que paraba Rui Silva. De hecho el portero luso tuvo más tarde otra intervención clave para evitar el primer gol rojiblanco,en este caso a un siempre activo Luis Suárez. Pero el dominio fue alterno, pues los andaluces también se asomaron y con frecuencia a las inmediaciones de Jan Oblak.

Las subidas de Carlos Neva por banda izquierda generaron peligro constante en la meta del esloveno pero no fueron los únicos. La ocasión más clara de los visitantes fue de Germán tras un saque de esquina con un remate que se fue fuera por centímetros. En resumen, un primer acto donde Diego Martínez y Diego Simeone ("los dos Diegos" como dijo el incorregible Mateu Lahoz advirtiendo a ambos banquillos), trataron de amarrar bien para evitar errores fatales.

Marcos Llorente al rescate

La segunda parte nos dejó la misma intensidad pero un partido mucho más abierto, con ocasiones claras para ambos equipos desde el principio y goles. Especialmente cuando se abrieron ambos buscando el gol con más descaro. Y los rojiblancos empezaron pegando primero, ya que Luis Suárez avisó con un remate al larguero y Ángel Correa llevó peligro pero se topó con Rui Silva. Aunque es justo señalar que antes del gol de Marcos Llorente, vimos a Jan Oblak haciendo su milagro diario para mantener su portería intacta.

Como decíamos, era el ex del Real Madrid quien veía portería en el 63' con un gran disparo. De nuevo este jugador se echaba al equipo a los hombros para anotar, y allanar el camino. En cambio, los locales respondieron de manera inmediata, ya que en el 66' Yángel Herrera anotaba tras una jugada a balón parado, remate ante el que nada pudo hacer Jan Oblak. Un tanto que sentó como jarro de agua fría a los colchoneros en este caso, pero del que se repusieron también.

De nuevo a lomos de Marcos Llorente, con una gran capacidad para alcanzar la línea de fondo y liderando todas las jugadas ofensivas, el centrocampista dejaba a Ángel Correa un balón aparentemente sin peligro, pero que se envenenó tras tocar en un rival, de modo que el disparo del argentino supuso el segundo gol visitante en el 74'. Una diana que dejó ya a los locales casi sin capacidad de reacción, y que nos dejaba unos minutos de menos ocasiones, con los colchoneros dedicándose a esperar una contra y achicando agua. Así que al final lograron los madrileños el triunfo, espantan las dudas del lunes y siguen con su gran trayectoria en busca de la ansiada Liga.