Copa del Rey

Copa del Rey | El Athletic de Bilbao pone rumbo a cuartos de final

Con un doblete de un inspirado Asier Villalibre, los leones han superado la resistencia de un Deportivo Alavés que mereció mucho más en este derbi vasco. Sin duda, está siendo una temporada fantástica para el plantel de San Mamés.

Por Pedro Parra
2 min.
La alegría del Athletic de Bilbao @Maxppp

Tras la eliminatoria entre Getafe y Sevilla, era el turno de un nuevo cruce a partido único en los octavos de final de la Copa del Rey. Sin ir más lejos, irrumpía en acción un club que se encuentra en un óptimo estado de forma. Después de superar a la Real Sociedad en Liga, el Athletic de Bilbao encaraba otro derbi vasco que se vaticinaba sugerente. En concreto, mediría sus fuerzas con las de un Deportivo Alavés que llegaba con la moral por las nubes.

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Ernesto Valverde otorgaría la titularidad a un Julen Agirrezabala que deseaba seguir aprovechando la ocasión de reemplazar en este torneo a Unai Simón. Un fantástico guardameta que estaría acompañado en la parcela defensiva por Óscar de Marcos, Dani Vivian, Aitor Paredes e Iñigo Lekue. La sala de máquinas sería para Ander Herrera y Beñat Prados, quedando por delante el trío de ases de Álex Berenguer, Oihan Sancet e Iker Muniain. En punta de lanza, Asier Villalibre.

Por su parte, el estratega Luis García Plaza tiraría de rotaciones porque prioriza la permanencia en Primera División. Dicho lo cual, el guardián de sus dominios sería un Antonio Sivera que ha evidenciado continuamente su fiabilidad en la portería. La zaga dispondría de Álex Sola, Nahuel Tenaglia, Rubén Duarte y Víctor Parada, buscando la creación del juego con Antonio Blanco, Carlos Benavídez, Ianis Hagi y Xeber Alkain. En ataque, la dupla de baile de Giuliano Simeone y Samu Omorodion.

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Asier Villalibre se luce en San Mamés

El comienzo del compromiso sería realmente táctico, una batalla de pizarras en la que, de todos modos, faltaban ritmo y ocasiones. En el bando de los locales, la suplencia de Nico Williams se notaba en demasía en lo que guarda conexión con la producción ofensiva de los suyos. Pese a que apenas estaba sufriendo, la entidad de Vitoria sufriría en sus propias carnes la famosa ley del ex. A saber, en las botas de un Villalibre que ejecutaría un golpeo sensacional (1 – 0).

Es cierto que no estaban desplegando su imagen más brillante, aunque esa acción aislada era suficiente para los leones de cara a conservar la mínima ventaja. Al regresar del túnel de vestuarios, una doble intervención de Agirrezabala, siendo muy meritoria la segunda de ellas, dejaría con la miel en los labios a un resignado combinado babazorro. De hecho, el doblete de Villalibre, previo centro exquisito de De Marcos, significaría la puntilla (2 – 0). Una cuestión que guía al Athletic Club hacia cuartos de final.

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Los resultados de la jornada

Athletic Club 2 – 0 Deportivo Alavés

Getafe 1 – 3 Sevilla

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