Un disputado encuentro entre Brasil y Croacia abría este viernes la ronda de cuartos de final. Un equipo que tuvo de todo menos goles hasta la prórroga. Cuando una genialidad de Neymar desequilibró el choque, que igualaría Petkovic de forma sorprendente cuando el encuentro expiraba. Los penaltis decidieron que los subcampeones sean los que sigan adelante, dando el gran bombazo del torneo.
La gran favorita, Brasil, abría la ronda de cuartos de final que se disputa entre hoy y mañana, jugando nada menos que ante los vigentes subcampeones. La Croacia de un Luka Modric que no quería decir hoy adiós a su carrera internacional. Y que era de la partida junto a Marceo Brozovic y Mateo Kovacic. Grandes bazas de Zlatko Dalic para contener a la canarinha plagada de sus habituales estrellas ofensivas. Las cuales se encontrarían hoy ante un rocoso conjunto balcánico que, tirando de experiencia y oficio, supo minimizar sus virtudes.
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Los sudamericanos comenzaron mandando, generando peligro por medio de Vinicius Junior, quien tendría la opción más clara de toda la primera parte. Su disparo lo sacaba Josko Gvardiol, probablemente el mejor central del torneo hasta la fecha. Imperial comandando de nuevo la zaga croata. Eso, y varias imprecisiones en el juego ofensivo, provocaron que no pudiéramos ver a un Brasil deslumbrante como el de octavos de final. Tocaba un encuentro más trabajado para los de Tite, que además eran amenazados por los europeos de forma intermitente. Especialmente con Ivan Perisic como gran puñal por banda izquierda.
Además los croatas supieron mantener el orden y lanzar alguna contra peligrosa. Con el citado atacante del Tottenham por su costado y un Josip Juranovic, lateral hoy vinculado al Atlético de Madrid, que estuvo muy bien en sus actuaciones durante el encuentro. Así, en un ritmo lento diferente al de otros partidos de la verdeamarelha, se consumía la primera parte. Sin que Neymar o Richarlison tuvieran demasiado protagonismo. Igual que Casemiro o Lucas Paquetá no acertaron a encontrar huecos en la zaga croata, muy bien trabajada.
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Dominik Livakovic sostiene a Croacia
Tras ese primer acto, si quieren de cierto tanteo, Brasilsalió como un vendaval en la primera mitad. Con varias acciones de peligro seguidas, por medio de un Neymar que lograba aparecer más entre líneas. Peor emergía la figura de Dominik Livakovic en ese tramo de partido, con varias intervenciones de mérito. Que continuarían en los siguientes minutos, cuando la ofensiva de Brasil se incrementaba con el paso de los minutos y los cambios. Entre ellos el de Rodrygo que entraba por Vinicius Junior.
Previamente Tite había dado entrada a Antony por Raphinha y posteriormente Neymar, tras una combinación con Richarlison, no acertaba en el 75' ante un gran Dominik Livakovic que se agigantaba ante la estrella del PSG. Crecía mucho la figura del portero croata mientras los balcánicos apenas lograban pasar del centro del campo. Quizás por eso Tite también prescindía del delantero del Tottenham para dar entrada a Pedro, las estrella del Flamengo, que apenas tuvo media hora ante Camerún.
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Livakovic seguía firme sosteniendo a Croacia, que se dejaba ver algo más por el área de Alisson en la recta final del encuentro. El cual se encaminaba hacia la prórroga poco a poco, que el combinado balcánico lograba forzar con gran mérito sin conceder más grietas a una Brasil que no encontraba el gol pese a sus esfuerzos. Aguantaba Luka Modric en cancha y seguían las espadas en todo lo alto a la espera de nuevos movimientos.
Neymar desequilibra… pero Croacia sobrevive
Ya en el tiempo extra, mientras ambos seleccionadores se guardaban cartas en la manga para esos minutos finales, el guión fue similar al de la segunda parte. Con Croacia ante un gran rigor defensivo, esperando alguna contra como la de Petkovic. Y cuando expiraba la primera parte de la prórroga: apareció. Entrando por el centro, apoyándose en Lucas Paquetá, regateaba a Livakovic y anotaba a puerta vacía pese a la insistencia de Luka Modric por evitarlo.
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Una diana psicológica, que rompía al fin la gran resistencia croata. Los subcampeones del Mundo lo intentaron en la segunda parte de la prórroga, con cambios y muchos delanteros, porque necesitaban un gol para igualar y forzar los penaltis. Que llegaría de forma increíble con una contra estupendamente llevada por Luka Modric. Tite había quitado del campo a Eder Militao y el centrocampista croata lograba lanzar ese contragolpe para que Petkovic anotara en el 117' a pase de Orsic, con la zurda en una media vuelta, forzando los penaltis ante una Brasil atónita. A la que Livakovic de nuevo negaba otro gol en el último suspiro.
Rodrygo y Marquinhos condenan a Brasil
Tanda final por tanto para dirimir el nombre del primer semifinalista. Croacia llegaba crecida tras su igualada y con su portero en un estado de forma espectacular. Vlasic anotaba el primero y Rodrygo fallaba el primero de Brasil, o más bien lo paraba Livakovic. Lovro Majer anotaba después, como Casemiro. Luka Modric también anotaba y Pedro no fallaba después. Orsic ajustaba el cuarto y dejaba a Brasil contra las cuerdas. Porque Marquinhos fallaba el suyo al lanzar al poste y por tanto Croacia pasaba a semifinales.
El equipo balcánico volvía a sorprender, alcanzando la tercera semifinal de su historia este viernes. En un excelente ejercicio de supervivencia donde dejaban de lado a la gran favorita para el título. Los grandes argumentos ofensivos de Brasil se iban por la borda ante el coraje croata, una selección que no se rindió hasta el final. Y que espera ya rival en semifinales entre Argentina o Países Bajos. ¿Volveremos a tener pleno europeo en semifinales?
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