El decreciente rendimiento goleador de Luis Suárez

El Atlético de Madrid se prepara para un verano agitado. El cuadro rojiblanco cerrará un buen número de movimientos que incluirá a varias de sus piezas actuales. Uno de los miembros de la plantilla madrileña que dirá adiós coincidiendo con la conclusión del curso será el prolífico delantero uruguayo Luis Suárez.

Llegado a nuestro fútbol en verano de 2014 después de su polémico Mundial, el charrúa acumula ocho temporadas en España en los que ha mostrado un notable rendimiento que, sin embargo, ha ido en franco descenso durante los últimos años. Después de una primera temporada con el FC Barcelona que no pudo disputar en su totalidad debido a la sanción de la FIFA por su mordisco a Giorgio Chiellini, el ariete explotó en el curso 2015-2016.

En brillante paso por el FC Barcelona

Lo hizo sumando la friolera de 58 goles, unos registros al alcance de los grandes elegidos y que fueron claves para los éxitos del cuadro culé. Pese a no mostrarse tan prolífico en los tres siguientes curso, sus registros con la elástica azulgrana siguieron siendo interesantes (37 goles, 31 y 25), si bien su físico ya no era el de antaño.

En esta situación, y tras un curso 2019-2020 con 21 goles en 36 partidos, el FC Barcelona decidió no seguir contando con él, por lo que al charrúa le tocó buscarse un nuevo equipo. Finalmente aceptó el reto que le ofrecía Diego Pablo Simeone en el Atlético de Madrid, donde arrancó como un tiro sumando 2 goles y una asistencia en su debut frente al Granada. Era el preludio de una campaña que terminó con 21 goles (32 partidos) y levantando el título de Liga. En el debe, su nula aportación en Liga de Campeones (6 partidos disputados sin ver puerta).

Caída en los registros

Esta temporada su rendimiento está siendo sensiblemente menor. Con una importancia decreciente (tan solo ha sido titular en 19 de los 33 partidos de Liga que ha disputado), hasta el momento tan solo ha visto puerta en 13 oportunidades a lo largo de 41 partidos oficiales. Se trata de sus peores registros desde que aterrizó en España, lo cual da clara muestra de la situación.

A sus 35 años, el de Salto deshoja la margarita de las oportunidades que ofrece el mercado de fichaje y todavía no ha decidido. De lo que no cabe duda es que se marchará de nuestra Liga convertido en uno de los mejores goleadores durante los últimos años.