Pese al favoritismo portugués, el conjunto de la Serie A se ha llevado el gato al agua en este primer asalto de cuartos de final. En concreto, gracias a las dianas transformadas por Nicolò Barella y Romelu Lukaku (de penalti) en el segundo acto.
La hora de la verdad ha llegado en lo que se refiere al primer asalto de los cuartos de final de la Liga de Campeones. De hecho, contaríamos en acción con una de las auténticas sensaciones de lo que llevamos de curso en el entorchado que defiende el Real Madrid. Nos referimos al Benfica, escuadra que se caracteriza por desplegar una sugerente propuesta futbolística. Un combinado portugués que, dicho sea de paso, recibía la visita del Inter de Milán.
Sigue después de este anuncio
Roger Schmidt optaría de entrada por un Odisseas Vlachodimos que se ha consolidado, con méritos propios, como el guardián de sus dominios. Un magnífico cancerbero que, además, contaría con el apoyo en la retaguardia de Gilberto, António Silva, Morato y Alejandro Grimaldo. En cuanto al doble pivote, quedaría conformado por la consistencia de Florentino Luís y Chiquinho. Por su parte, Joao Mário, Fredrik Aursnes y Rafa Silva buscarían asociarse con Gonçalo Ramos.
Pasando a la disposición táctica de un cuestionado Simone Inzaghi, se decantaría de nuevo por un André Onana que disfruta de la confianza que también tuvo con el Ajax. El sistema de tres centrales estaría representado por Matteo Darmian, Francesco Acerbi y Alessandro Bastoni, dejando el dinamismo en los carriles a Denzel Dumfries y Federico Dimarco. La medular correría a cargo de Nicolò Barella, Marcelo Brozovic y Henrikh Mkhitaryan, mientras que la dupla en ataque sería Lautaro Martínez y Edin Dzeko.
Sigue después de este anuncio
Los zarpazos de Barella y Lukaku
Los lusos saldrían con la intención de imponer su estilo desde el pitido inicial del trencilla, si bien es cierto que los nerazzurri se protegían a la perfección. De hecho, estaban consiguiendo poner freno al ímpetu local. Brozovic probaría fortuna en los primeros compases, al igual que un Barella que se mostraría bastante activo. Dicho lo cual, Onana estaría sensacional con una espectacular intervención ante el zapatazo de Rafa Silva. Acto seguido, el chut de Joao Mário se marcharía ligeramente desviado.
La réplica llegaría con un lanzamiento de larga distancia de un Acerbi que estaría cerca de sorprender a Vlachodimos. El Inter estaba logrando minimizar las virtudes de Silva y Gonçalo Ramos, además de salir al contragolpe en transiciones rápidas con Lautaro. Grimaldo y Dimarco lo intentarían en los últimos compases de los 45 minutos inaugurales, aunque sin fortuna. Eso sí, la historia cambiaría por completo en el Estádio da Luz al volver del túnel de vestuarios.
Sigue después de este anuncio
¿El motivo? Barella se beneficiaría del envío filtrado por Bastoni para enviar el cuero al fondo de las mallas de la escuadra lisboeta (0 – 1). Pese a ello, el Benfica no perdería la cara al compromiso en ningún instante, siendo superior en varios tramos de la segunda mitad. Sin embargo, la estrategia de Inzaghi estaba dando sus frutos con un partido muy inteligente. Tras una revisión en el VAR, el árbitro decretaría una pena máxima (por mano) que sería convertida por Romelu Lukaku (0 – 2). Así las cosas, golpe encima de la mesa del Inter en Lisboa.
Más información
Sigue después de este anuncio
Noticias
Sigue después de este anuncio
