El Manchester United toma medidas: la condición para que los jugadores ganen dinero

Las medidas de austeridad en el Manchester United continúan. Recientemente, el multimillonario y copropietario Sir Jim Ratcliffe anunció que existe una necesidad urgente de actuar en el ámbito financiero, que no puede posponerse, porque de lo contrario el club, considerado “inflado”, “quebraría en Navidad”.

Hasta ahora, las medidas de reducción de costos, algunas de las cuales parecían absurdas, afectaron principalmente a los empleados y aficionados de los Red Devils, generando indignación en torno al club. Sin embargo, ahora parece que se ha activado la siguiente etapa de la política de austeridad. Según informa The Sun, los sueldos de los jugadores están en el punto de mira.

Ratcliffe ha declarado la guerra a los exorbitantes costos salariales de United, según el tabloide. Los sueldos de los jugadores serán recortados drásticamente tras años de declive deportivo. Además, los salarios de las nuevas incorporaciones y los contratos renegociados se estructurarán de manera diferente en el futuro. En lugar de altos sueldos fijos, el club quiere trabajar con grandes bonos por rendimiento.

Sólo contratos basados en el rendimiento

“El club está pasando a contratos basados en el rendimiento. Esto se ha discutido con todos los agentes. Seguiremos pagando de forma competitiva, pero necesitamos controlar nuestros costos salariales y asegurarnos de obtener una buena relación calidad-precio”, cita The Sun a una fuente interna del club.

Este nuevo enfoque podría tener un impacto directo próximamente en la decisión de Kobbie Mainoo. El joven de 19 años, canterano de los Red Devils, es uno de los pocos puntos brillantes en una temporada que hasta ahora ha sido desastrosa. El diez veces internacional inglés sigue jugando con su primer contrato profesional, que apenas supera el millón de euros, pero ahora exige un nuevo contrato por unos 9,5 millones de euros anuales.

El centrocampista es considerado una joya y el futuro rostro del club. Sin embargo, Ratcliffe se niega a concederle su deseo y está decidido a cambiar la cultura del rendimiento en United. Al hacerlo, el multimillonario aparentemente está dispuesto a correr el riesgo de perder a Mainoo. Aunque el jugador tiene contrato hasta 2027, se dice que hay varios clubes interesados, entre ellos el Bayern de Múnich y el Chelsea.

Traspasos sobrevalorados a plazos

Otro problema que molesta especialmente a Ratcliffe son los antiguos acuerdos de traspaso, por los que el club sigue pagando sumas considerables año tras año. Solo este verano, United debe desembolsar cerca de 120 millones de euros en cuotas de fichajes. Algunos de los jugadores relacionados ni siquiera están actualmente en la plantilla.

“Este verano, el club tiene que ‘comprar’ a Jadon Sancho, Antony, Casemiro, Lisandro Martínez, André Onana y Rasmus Højlund. Si no fichamos a nadie más, estaremos comprando a estos jugadores. Hemos heredado estas cosas y tenemos que arreglarlas. Por Sancho, que ahora juega en el Chelsea y cuyo salario pagamos a medias, estamos desembolsando 20 millones de euros al Borussia Dortmund”, se quejó recientemente el copropietario del club.

A pesar de los altos costos de personal y las costosas transferencias de los últimos años, United ocupa actualmente un decepcionante 14.º lugar en la tabla. En 17 partidos de liga bajo el mando del nuevo entrenador Rúben Amorim, el equipo solo ha conseguido cinco victorias.

Última oportunidad

La última esperanza de lograr un título esta temporada para los mancunianos reside en la Europa League. Esta noche (21:00 h), United se enfrenta a la Real Sociedad. El partido de ida terminó 1-1. Por lo tanto, se necesita una buena actuación para avanzar. Los profesionales del Manchester tendrán que empezar a rendir con más frecuencia si quieren seguir cobrando generosamente.