UEFA Europa League

Europa League | Bruno Fernandes acaba con las ilusiones europeas de la Real Sociedad

La Real Sociedad se despide de la Europa League tras caer por 3-1 ante el Manchester United en un partido en el que volvió a ofrecer una versión discreta y en el que, además, se mostró incapaz de conservar el 0-1 sumado por Mikel Oyarzabal desde el punto de penalti. Bruno Fernandes fue el verdugo de los vascos al firmar un hat trick.

Por Juan C. Navarro
3 min.
Bruno Fernandes celebra un gol @Maxppp

Noche de todo o nada para la Real Sociedad. Tras el empate a uno cosechado en su feudo, los donostiarras se presentaban hoy en Old Trafford dispuestos a mostrar una mejor cara que hace una semana, doblegar a un Manchester United que también se encuentra a años luz de su mejor versión y colarse en cuartos de final de la Europa League.

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Los vascos entraron al partido con una actitud elogiable, dispuestos a llevar la voz cantante, y sus buenas intenciones encontraron premio muy pronto, tras un centro al área en el que Matthijs de Ligt, en su intento por despejar, golpeó más el pie de Mikel Oyarzabal que el balón. Tras ser advertido por el VAR, Benoît Bastien cobró el penalti y el mismo Oyarzabal subió el 0-1 al marcador (10').

Por desgracia, poco le duró la alegría a los txuri urdin, ya que sólo seis minutos después, los británicos aprovecharon un balón a espaldas de la zaga visitante para presentarse con superioridad en el área y cosechar una pena máxima. En su intento por despejar un pase de la muerte, Igor Zubeldia se llevó por delante a Rasmus Hojlund y el colegiado no dudó en señalar una falta que Bruno Fernandes transformó en el 1-1.

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El nuevo empate nos devolvió un partido más igualado, con idas y venidas, en el que los británicos parecieron algo más incisivos, aunque sin llegar a molestar en demasía a Álex Remiro. Algún escarceo de Zirkzee y Hojlund, varios disparos de un Patrick Dorgu tan generoso en esfuerzo como rácano en talento y poco más. Bueno sí, algo más que una Real bastante roma y supeditada a las aisladas apariciones de Take Kubo.

Penalti, expulsión, derrota y adiós

Salió más enchufado el ManU tras el paso por vestuarios y, fruto de esa intensidad, logró sacar petróleo de una acción algo confusa en el área vasca en la que Aritz Elustondo acabó derribando sin pretenderlo al incansable Dorgu. Bruno Fernandes se encargó del lanzamiento y tras engañar de nuevo a Remiro subió el 2-1 al marcador (minuto 50).

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El tanto cayó como una losa sobre los guipuzcoanos, que tardaron en reaccionar y que, para colmo, cuando comenzaban a dar un paso al frente, se toparon con una tarjeta roja. En un balón largo, Jon Aramburu trabó al correcaminos Dorgu cuando ya corría desbocado hacia la meta rival y Bastien no dudó ni un segundo en enviarle a la caseta. El zaguero llevaba apenas siete minutos sobre el verde.

Aunque hizo lo posible por no hundirse y mantenerse viva hasta el final, la Real apenas logró inquietar a un United que, sin hacer nada del otro mundo, terminó anotando dos goles más. El tercero volvió a llevar la firma de su jugador más fiable, Bruno Fernandes, mientras que el cuarto fue sumado por un Diogo Dalot que supo asomarse al área en el momento de adecuado. De este modo, y con una goleada, por otra parte excesiva, concluyó un choque que deja a la Real sin Europa y con la sensación de estar cerca de tirar la temporada por el retrete.

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