El retorno triunfal de Colombia a la escena internacional
Ausente del Mundial 2022, Colombia supo subir el listón. Autores de una brillante Copa América, los de Néstor Lorenzo se encuentran hoy en muy buena posición en el grupo de clasificación sudamericano para el próximo Mundial. Una renovación que agrada a todos.
Luego de una notable ausencia durante el Mundial de Qatar 2022, Colombia está en pleno resurgimiento y se prepara para regresar a las alturas del fútbol internacional. Actualmente, segunda en el grupo de clasificación sudamericana para el Mundial de 2026, a tres puntos de la Argentina de Lionel Messi, la selección cafetera reueva sus ambiciones, impulsada por una nueva generación de talentos y técnicos que están encontrando su mejor nivel.
James Rodríguez, ex del Mónaco y del Real Madrid, ahora en el Rayo Vallecano, es hoy una de las figuras de este resurgimiento. Después de un período difícil marcado por las lesiones, recuperó su forma e influencia en el campo. A su lado, Luis Díaz, delantero del Liverpool, aporta su dinamismo y su capacidad para desestabilizar las defensas rivales.
Néstor Lorenzo, “el desconocido” al mando
Si en el campo la mayoría de los jugadores juegan actualmente en los grandes nombres del fútbol europeo, el líder de esta compañía no es tan conocido. Néstor Lorenzo, que llegó a la selección en julio de 2022, sorprendió inicialmente a muchos observadores del fútbol local cuando fue nombrado. Luego fue criticado por su falta de experiencia.
De hecho, su primera y única experiencia real como entrenador fue una temporada en Melgar en Perú, entre 2021 y 2022, donde alcanzó los cuartos de final de la Copa Sudamericana. Lorenzo había sido anteriormente asistente en los banquillos de Argentina, los Tigres de Monterrey, pero también de Colombia (entre 2012 y 2019). En el puesto de asistente, sin embargo, obtendrá una sólida experiencia en el fútbol sudamericano e internacional, criterio, al parecer, fundamental para su nombramiento como número uno con los Tricolores.
A dos años de su llegada, Néstor Lorenzo ya no da de qué hablar con prensa y aficionados, sino todo lo contrario. Colombia logró una loca racha invicta de 28 partidos con él, un récord para el país. Bajo sus órdenes, la nación logró vencer a equipos importantes del panorama mundial, como Alemania, Brasil, Uruguay y España. La imbatibilidad sólo acabó en la final de la Copa América el pasado mes de julio, tras una derrota en la prórroga ante Argentina (1-0).
Capitalizar la Copa América
Ese recorrido es también una de las muestras de la renovación colombiana. Una competición casi impecable que impulsó a Colombia a la final. Cabe recordar que sólo había alcanzado el escalón más alto dos veces: una derrota en 1975 y una victoria en 2001 contra México. “Hoy Néstor Lorenzo ha recuperado la confianza en la selección y se ha consolidado como un entrenador con mucha experiencia. Llegó al banquillo colombiano como un desconocido y se ganó el cariño de la afición”, señalaba hace días el diario colombiano El Tiempo. Otro símbolo de la renovación de la selección, esta Copa América probablemente sirva de base para el trabajo futuro de Lorenzo.
“Siempre hemos tratado de respetar el estilo del fútbol colombiano. Me encanta el buen fútbol, me formé en un club que es conocido como uno de los mejores centros de entrenamiento del mundo, Argentinos Juniors, que es como acá Envigado, ha salido jugadores muy talentosos. También debemos confiar en ello”, explicó el técnico antes de su último partido, aportando algunas ideas sobre el posible futuro de la selección. Lo suficiente como para vislumbrar un futuro brillante para los próximos años.
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