Una vez que había dado su brazo a torcer contra la Juventus de Turín en San Siro, el AC Milan pretendía resarcirse de lo sucedido ante los bianconeri más pronto que tarde en la Serie A. Para ello, los rossoneri, líderes del cetro que defiende la Vecchia Signora, harían lo indecible con la finalidad de sumar los tres puntos frente al Torino, un conjunto que no pasó del empate con el Hellas Verona.
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Alcanzado el ecuador de los 45 minutos iniciales, el siete veces ganador de la Liga de Campeones tomaría la delantera con motivo de la diana materializada por Rafael Leao (1 – 0). Una renta que ampliaría Franck Kessié instantes más tarde, dado que el centrocampista, pieza esencial en la medular del proyecto de Stefano Pioli, no perdonaría desde el punto fatídico para sellar el triunfo del AC Milan (2 – 0).
