Liga de Campeones | El AC Milan deja vivo al Newcastle United
El cuadro rossonero no ha podido derribar el muro inglés este martes y suman ambos conjuntos solamente un punto en el inicio del "grupo de la muerte". Empate sin goles y con lesiones preocupantes para los italianos.
Este primer martes de Liga de Campeones arrancaba también con el "grupo de la muerte" abriendo fuego. En este caso San Siro era el escenario del primero de esos duelos con el AC Milan recibiendo al Newcastle United. Encuentro lleno de carga emocional también por ese retorno de Sandro Tonali a la que ha sido su casa hasta el pasado verano, ante el club donde alcanzara las semifinales la temporada pasada.
Los de Stefano Pioli hicieron valer su condición de locales con más presencia en el área de las urracas, tras unos primeros compases de tanteo. Aunque no lograron concretar esas numerosas ocasiones, especialmente gracias al buen hacer de un Nick Pope que fue claro protagonista en el primer acto. Sus paradas marcaron diferencias, con hasta cinco intervenciones claras en un tramo unos veinte minutos donde los rossoneri asediaron su área.
Los italianos perdonaron por tanto bastante, mientras los ingleses no pudieron apenas imponer su clásico ritmo con el que marcan diferencias en su campeonato. Aun así tuvieron acercamientos a los dominios de un siempre sobrio Mike Maignan, pero no inquietaron demasiado. El resultado era la mejor noticia para los visitantes pero el encuentro seguía abierto. Para los de Eddie Howe seguía siendo clave saber atajar el potencial de Rafael Leao, Samu Chukwueze o Theo Hernández, que aprovechaban a sembrar el pánico con sus incursiones cada vez que su equipo se desordenaba. Especial mención para una gran jugada del delantero luso, que tras sortear a varios rivales no logró a rematar ante Nick Pope con acierto.
Lesiones y poco fútbol
En la segunda parte los rossoneri no lograban en cambio encontrar ese buen ritmo del primer tiempo donde solamente les había faltado el gol. De hecho poco a poco el Newcastle United se iba asentando en el campo de su rival, con Tomori achicando agua en varios tramos. Pero sobre todo la intensidad del partido parecía bajar en un duelo donde los locales se hacían muy largos y no lograban encontrar a sus hombres de ataque.
Y menos con claridad. Sean Longstaff era clave para adueñarse poco a poco de la medular para los ingleses, pero no llegaban después con demasiado peligro las urracas. Poco juego en las áreas por parte de ambos en un partido más igualado. Aunque pasada la primera media hora, los lombardos retomaron el control. Rafael Leao estuvo cerca de marcar con un cabezazo en el 73', pero sufrieron las importantes lesiones de Ruben Loftus-Cheek y Mike Maignan que obligaron a Stefano Pioli a sustituir a ambos. Antes se había marchado del terreno de juego Sandro Tonali, recibiendo una gran ovación de su ex afición.
Los británicos se defendieron bien pero en el tramo final no lograron inquietar a Marco Sportiello, con Alexander Isak siempre demasiado lejos de la pelota. Y los italianos seguían imprecisos, con Theo Hernández u Olivier Giroud intentándolo con disparos lejanos y sin peligro. Curiosamente la última acción del choque sería un disparo de Sean Longstaff que casi anota en la opción más clara de los visitantes en todo el encuentro. Que se llevan hoy un punto de un escenario complicado y que augura mucha igualdad en este complicado grupo.
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