Gasperini minimiza los graves insultos racistas a Dusan Vlahovic

Queda claro que se vive un problema estructural en el fútbol con el racismo. Si en España uno de los mayores damnificados es Vinícius, en Italia los insultos racistas son, lamentablemente, pan de cada día en muchos estadios. El último caso se ha dado hace escasas horas, en el encuentro entre la Atalanta y la Juventus (0-2), contra Dusan Vlahovic. La afición bergamasca ha cantado contra el serbio, llamándole despectivamente gitano.

Un acto despreciable que, sin embargo, ha tratado de ser minimizado. Tras el partido, Gian Piero Gasperini ha tratado de quitarle hierro a un asunto tan serio como es el racismo: "No todo es racismo, a veces también son cosas individuales. Creo que es más grosería que racismo. Si fuera racismo, también se insultaría a Pasalic porque afecta a toda la etnia. A menudo en los estadios hay varios insultos: tiendo a pensar así porque el racismo es una cosa muy seria, mucho peor, que implica a más gente. Desgraciadamente son coros groseros dirigidos a un jugador. Estoy de acuerdo en que hay que luchar contra el racismo pero no hay que confundirlo, si seguimos metiendo todo en el mismo saco entonces todos somos racistas. Por supuesto que me desmarco".