Primera División

Liga | Ejercicio de supervivencia del Atlético de Madrid en el Metropolitano

Partido cargado de emoción e intensidad el que se ha disputado en la capital de España. A saber, el Atlético de Madrid se llevaría el gato al agua con la diana de un Julián Álvarez que atraviesa un momento muy dulce. Por su parte, el Athletic Club se estrellaría con la madera hasta en tres ocasiones.

Por Pedro Parra
3 min.
Pablo Barrios con el Atleti @Maxppp

Ocasión de oro para el Atlético de Madrid para dar un nuevo zarpazo en su carrera de fondo en nuestra Liga. Un sensacional torneo donde, dicho sea de paso, el Real Madrid ha dado su brazo a torcer en el feudo del Real Betis. Pese a tomar la delantera de inicio con la diana de Brahim Díaz, el equipo de Carlo Ancelotti se ha visto desbordado en el campo por un huracán verdiblanco que ha estado comandado por el mágico Isco Alarcón.

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De esta forma, el Atleti puede aprovechar las dudas de un club merengue con el que se enfrentará en los octavos de final de la Champions. Dicho lo cual, la entidad que preside Enrique Cerezo era consciente de la magnitud del desafío que tenía por delante en la sesión sabatina. En concreto, porque se había citado con un Athletic de Bilbao que depende de sí mismo para certificar su billete rumbo a la próxima edición de la orejona.

Sin ninguna duda, se trataría de un compromiso directo entre dos de los colosos por excelencia de la máxima categoría del deporte rey en nuestro país. En teoría, los locales partirían con la vitola de favoritos al disponer del apoyo de una afición que está realmente ilusionada con los suyos en una temporada que puede ser de ensueño. No obstante, los leones llegaban a este envite con ganas de presentar batalla y rugir con fuerza en el Metropolitano.

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Julián Álvarez es un tesoro para su Atleti

Como era de esperar, el duelo se desarrollaría con mucho ritmo y una intensidad espectacular por parte de ambos contendientes. En el bando bilbaíno, Dani Vivian haría gala de su jerarquía como el verdadero mariscal de la retaguardia de los suyos. Es más, el central realizó intercepciones defensivas de mucho mérito para frenar el empuje de su oponente. Sin descuidar a Samu Lino y Alexander Sörloth, el agitador por excelencia del equipo madrileño estaba siendo Giuliano.

En una incursión de Javi Galán, el lateral pondría un caramelo, pero Robin Le Normand perdonaría con todo a su favor. Por su parte, en un gran pase filtrado por Vivian, Jan Oblak ganaría la partida a Iñaki Williams en un mano a mano. Álex Berenguer estaba aportando mucha velocidad como la referencia del Athletic Club, mientras que Giuliano era un quebradero de cabeza para la zaga del Athletic Club. Rodrigo De Paul daba exquisitez al juego, junto con un increíble despliegue físico. Y qué decir de Antoine Griezmann, un playmaker que es capaz de mejorar cada acción en la que conecta con el esférico.

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Asimismo, conviene matizar que los dos conjuntos generaban gran sensación de peligro con transiciones vertiginosas al contragolpe. Unai Simón, quien exhibe mucha seguridad bajo palos, mediría mal en una salida, aunque Sörloth llegaría muy forzado para atinar con su remate. En cuanto a Nico Williams, no conseguía ser diferencial con su habitual desborde en el césped. Berenguer no estaría fino después de un buen pase de Andoni Gorosabel, pero el que no perdonaría sería un inspirado Julián Álvarez al poco de saltar al campo. Instantes más tarde, el Athletic Club se toparía con la madera por partida triple -dos largueros-, por lo que el Atleti impondría su ley con mucho sufrimiento.

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