La salida de Kylian Mbappé se ha visto en muchos medios como una de las causas de la devaluación de derechos de televisión del campeonato galo, por ahora sin operador para la nueva temporada. Mientras tanto los de Luis Enrique trazan las primeras líneas del proyecto.
Mucho han cambiado las cosas. El adiós en apenas un año de grandes estrellas como Neymar, Lionel Messi, Sergio Ramos y sobre todo Kylian Mbappé parece rebajar claramente e nivel de la Ligue 1. De hecho la salida del galo coincide con las negociaciones del nuevo contrato televisivo que no se cierran.
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“En un principio, Vincent Labrune, presidente de la LFP, exigía 800 millones de euros por los derechos de la Ligue 1 entre 2024 y 2029. Ahora, se habla de casi la mitad, 450 M€, a través de un canal cien por cien de Ligue 1 que negociaría el organismo con todos los operadores de internet como SFR, Boygues o incluso Orange”, afirmaban hace unos días desde Sport.
El gran reto de Luis Enrique
Veremos en qué queda todo. Lo que parece más claro ya es que, pese a que pueda llegar un sustituto claro de Kylian Mbappé (Khvicha Kvaratskhelia era la principal opción), la escuadra que dirige Luis Enrique se enfocará en el colectivo. Sobre todo en una plantilla rejuvenecida donde ya muchos de sus baluartes tenían menos de 28 años.
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Vitinha, Warren Zaïre-Emrey, Bradley Barcola, Gonçalo Ramos, Randal Kolo Muani, Fabián Ruiz, Kang In Lee, Manuel Ugarte o el propio Gianluigi Donnarumma. Proyecto que premiará el colectivo y pensado a largo plazo. Quizás las expectativas en Europa ahora bajarán o, quien sabe, esto puede descargar de presión a un grupo competitivo para ayudar a escalar el último peldaño.
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