La labor de Rubén Baraja en el Valencia está siendo superlativa. Con un presupuesto ajustadísimo, obligado a vender a sus mejores futbolistas, el Pipo ha logrado meter al Valencia en la lucha por Europa. Pese a que los ches esperan movimientos, como las llegadas de Peter Federico o Rafa Mir, el técnico asturiano ha decicido resignarse con la situación del club.
Preguntado por el mercado, el técnico che ha sido sincero, esperando pocos movimientos: “No, esta semana nos hemos focalizado en el partido del Atleti. No tengo información definida o concreta. Quedan 4-5 días de mercado y puede pasar cualquier cosa si el mercado está abierto. Tengo la sensación de pocos movimientos. No depende de mí, la plantilla es corta y nos hace reconvertir jugadores. Nos hace mejores a todos. Todo lo que sea quitarnos energía es negativo. Por fuera necesitaríamos reforzarnos. Necesidades tenemos, pero no de ahora. Nos adaptaremos. Hay que mantenerse ahí”.
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