Liga de Campeones

Liga de Campeones | El Real Madrid se pone el mono de trabajo en Anfield y estará en semifinales

El Real Madrid sella en Anfield el pasaporte para las semifinales del máximo torneo continental y se verá las caras con el Chelsea en la penúltima ronda. Partido muy serio de los de Zinedine Zidane en Anfield para maniatar a un Liverpool que no generó demasiadas oportunidades de peligro y no se mostró demasiado avasallador pese a las necesidades derivadas del resultado de la ida.

Por Iván Vargas
4 min.
Mohamed Salah intenta deshacerse de Toni Kroos @Maxppp

El Real Madrid estará en semifinales de Liga de Campeones. Lo hará después de un partido muy sobrio en suelo inglés y cimentado en un brillante trabajo defensivo en el que han brillado sobre todo los centrales Nacho Fernández y Éder Militao. Los blancos logran un empate a cero que convierte en oro la victoria lograda la semana pasada en la capital del España.

Sigue después de este anuncio

Salió el Liverpool con brío y la clara intención de hacerse con el control del partido. Anfield estaba vacío, pero los locales no parecían echar de menos a su enfervorecido público. James Milner golpeaba con fuerza a Karim Benzema cuando apenas habían transcurrido unos minutos. El centrocampista inglés comenzaba a marcar territorio y las primeras ocasiones eran locales.

Sin embargo, Thibaut Courtois respondía. Primero tiraba de reflejos para repeler un tiro de Mohamed Salah en el minuto 2 y luego se quedaba suspendido en el aire para lucirse ante un disparo colocado de James Milner (10’). El centrocampista de Leeds lo mismo destroza las botas a Karim Benzema con una entrada que coloca un balón a la escuadra.

Sigue después de este anuncio

Un Real Madrid muy sobrio

Visitaba hoy Anfield el Real Madrid. Lo hacía después de su solvente victoria del partido de ida sobre el césped del –criticado por Jürgen Klopp- césped del Alfredo Di Stéfano de hace apenas una semana (3-1). Lo hacía también con la moral disparada tras haber doblegado al FC Barcelona el pasado fin de semana (2-1) y consolidado como la principal alternativa al Atlético de Madrid en la carrera por el título de Liga.

El cuadro inglés, por su parte, afrontaba el choque con varias dudas tanto en su juego como en su resultado. Situado actualmente fuera de los puestos que le permitirían disputar la máxima competición europea el curso que viene, los reds querían aferrarse a la propia Liga de Campeones como tabla de salvación para una gris temporada.

Sigue después de este anuncio

El Real Madrid fallaba pases sencillos y parecía abrumado, si bien los agobios para el los de Zinedine Zidane se iban desvaneciendo conforme lo hacían los minutos. Una jugada de Karim Benzema acababa topándose con el poste de Alisson después de un rechace en un defensa local (19’) mientras el ímpetu local iba bajando enteros.

Al igual que pasó en el choque de ida, las bajas definían a ambos conjuntos. Sobre todo en parcela defensiva. Privados de su pareja de centrales titular debido a distintas razones, tanto Klopp como Zinedine Zidane se encontraban en la necesidad de reconfigurar sus equipos a fin de afrontar este partido vital. Y lo cierto es que la zaga blanca tuvo un rendimiento excelente. Nacho parecía estar en todas partes y Éder Militao no desentonaba y confirmaba todo lo bueno que ha venido mostrado en los últimos partidos.

Sigue después de este anuncio

El Liverpool encontraba dificultades en la construcción de juego, presionaba con menos energía y el único peligro que lograba generar era cuando robaban y podían salir con velocidad. El Real Madrid tejía una tela de araña que los de Jürgen Kloop no supieron desenmarañar y el partido se fue al descanso con el empate local.

Se repite el guion

La segunda mitad comenzó exactamente igual que la primera. El Liverpool arrancaba con frenesí y Roberto Firmino probaba a Thibaut Courtois cuando todavía no se había alcanzado el primer minuto. El belga volvía a responder con sobriedad para no permitir un tanto que abriría de par en par la puerta la puerta a la esperanza del Liverpool.

Sin embargo, el Real Madrid no estaba para bromas. Y mucho menos para regalar nada. Vinicius se convertían en un segundo carrilero cuando hacía falta y Fede Valverde no desentonaba en su recién estrenada posición de lateral diestro. Pese a que no generaba ocasiones de demasiado peligro, el Real Madrid también evitaba que lo hiciera el Liverpool, algo más que suficiente para lograr la clasificación.

La más clara de los visitantes nació en una carrera de Vinicius. El brasileño explotaba su velocidad en el extremo zurdo y se colocaba mano a mano con Alisson. Sin embargo, el último toque se le iba un poco largo y su compatriota se adelantaba para abortar cualquier posibilidad. Un gol en ese momento (66’) hubiera sido clave.

El paso de los minutos evidenciaba que el cansancio se había apoderado de ambas escuadras. Las imprecisiones se sucedían y no había frescura. No la tuvo Karim Benzema, cuando en el minuto 82 culminó de forma defectuosa un remate de cabeza franco que muchos ya veían dentro de la portería inglesa.

Pese a la acumulación de atacantes por la que apostó Jürgen Klopp con los cambios el Liverpool asistía impotente a la sucesión de minutos. Los locales vieron acabar el partido incapaces de causar agobios a Thibaut Courtois y el Real Madrid cerró la clasificación para unas semifinales en las que se enfrentará al incómodo Chelsea, cuya mejora ha sido más que evidente tras el aterrizaje en su banquillo de Thomas Tuchel meses atrás.

Sigue después de este anuncio
Sigue después de este anuncio
Copiado al portapapeles