Liga de Campeones | Oda al fútbol de Real Madrid y Manchester City que lo dejan todo para la vuelta

Volvía a sonar la melodía de la Champions League en el Santiago Bernabéu. El Manchester City regresaba al mismo lugar donde el pasado curso era apeado de la máxima competición europea después de un mágico que perdurará para siempre en la memoria de los aficionados del Real Madrid. Sin embargo, hoy las circunstancias era completamente distintas: se trataba del partido de ida y sucediera lo que sucediera sobre el césped será el Etihad el que dictará sentencia la semana que viene. Sin embargo, ninguno de los equipos estaba dispuesto a especular con el marcador y salieron con todo.

Comenzó mejor el equipo de Pep Guardiola. Los citizens dominaban el esférico y monopolizaban la posesión. El Real Madrid esperaba atrás y se encomendaba a un sensación Thibaut Courtois que desbarataba las dos primeras oportunidades visitantes en los pies de Kevin de Bruyne (8’) y Rodri (13’). Hubo que esperar hasta el minuto 24 para que los blancos crearan su primera ocasión de peligro. Fue gracias a una incursión de Vinicius desde el extremo zurdo, el brasileño hacía el pase de la muerte para que Karim Benzema hiciera el 1-0 pero Ruben Dias rebañaba la pelota e impedía que el francés remataba.

Vinicius golpea primero

Con el paso de los minutos el monólogo celeste iba cambiando de color. El Real Madrid presionaba cada vez más arriba y metía el miedo en el cuerpo al City. La evolución del partido estaba siguiendo el diseño que había elaborado Carlo Ancelotti y el campeón de Europa estaba cada vez más cómodo. Y precisamente ahí fue cuando emergió Vinicius. El criticado Vinicius. El infravalorado Vinicius. El jugador que más faltas recibe en nuestro país pero acumula 15 tarjetas amarillas sumando Liga y Copa del Rey mientras que en Champions esta cifra se reduce a una.

El brasileño de 22 años recibió en el frontal del área después de una sensacional jugada de Eduardo Camavinga (¡qué presente tan brillante y esplendoroso futuro el del francés!) y se sacaba de la chistera un misil al que no lograba llegar Ederson. Era el minuto 35 y el Real Madrid daba el primer golpe. Lo hacía gracias a un jugador que si ya el pasado curso dio un salto de calidad, este año ha dibujado un doble tirabuzón y no se quita el disfraz de superhéroe. Con un Karim Benzema muy por debajo de su nivel, la figura del brasileño se ha agigantado.

El Manchester City empata cuando menos lo merece

El gol del Real Madrid había dejado muy tocado al Manchester City. Y es que el campeón inglés salió acobardado en la segunda mitad mientras los blancos crecían sobre el terreno de juego. Los de Carlo Ancelotti estaban cada vez más cómodos, merodeaban el área de Ederson y disfrutaban de algunas ocasiones claras como la que tuvo en sus botas Karim Benzema y que se iba por encima del larguero.

Pero cuando mejor estaba jugando el Real Madrid llegó el gol del Manchester City. Rodri se anticipaba en una salida de balón para robar el esférico y este acababa en los pies de Kevin de Bruyne. El belga le pegaba desde la frontal de área con el empeine y batía a Courtois. Era un latigazo seco, ajustado, prácticamente imparable. Era el 1-1 y quedan algo más de veinte minutos por delante.

El Real Madrid exhibió mandíbula y no notó el golpe que supuso el empate. Pese a que el City ya no estaba tan timorato como antes del gol, la escuadra de Chamartín seguía percutiendo en busca de un tanto que le permitiera llegar con ventaja a Inglaterra. Tuvo una ocasión clara Karim Benzema en el 78’, pero Ederson respondía con brillantez a su cabezazo. También la tuvo Tchouaméni prácticamente sobre la bocina pero se topaba nuevamente con el portero canarinho. Ya no hubo más goles y el 1-1 deja la eliminatoria completamente abierta a la espera del choque que se disputará dentro de una semana en Mánchester.