El Liverpool sumó una importante victoria ante el Aston Villa en un duelo en el que los hombres que dirige Jürgen Klopp mostraron determinación y exhibieron pegada. Los goles de Mohamed Salah, Virgil van Dijk y el joven Stefan Bajcetic resultaron decisivos ante un cuadro de Birmingham que, pese a mostrar una buena actitud y apostar por un juego vistoso y ofensivo, acabó acusando la falta de puntería de sus delanteros.
El Liverpool regresaba hoy a la competición con la necesidad de firmar su tercera victoria consecutiva en una Premier League en la que ya no puede permitirse demasiados tropiezos. Tras un irregular arranque de curso, los reds se encuentran aún lejos de las cuatro primeras plazas y deben sumar de tres en tres para no quedarse fuera de la Liga de Campeones el curso que viene.
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Aunque el Aston Villa ha mejorado sus prestaciones desde que Unai Emery asumió las riendas del vestuario, el partido se puso rápidamente de cara para los visitantes. En el minuto 4, tras una primera acción en la que ya había rondado el gol, el egipcio Mohamed Salah empujó a la red un servicio al primer toque de Andy Robertson y certificó las intenciones de su equipo. El norteafricano sumaba así, por cierto, su sexto gol en los seis últimos enfrentamientos contra los villanos.
Lejos de venirse abajo, el cuadro local reaccionó con valentía y comenzó a rondar el área defendida por Alisson. De hecho, si no llegó el empate es porque, para desesperación de Emery, sus delanteros no estuvieron nada finos en los metros finales. Y como quien perdona lo suele acabar pagando, en la recta final del primer acto, el Liverpool volvió a pisar el acelerador y firmó el 0-2. El autor del gol, un Virgil van Dijk que aprovechó una dejada de Salah tras un córner para superar con un disparo cruzado a Robin Olsen.
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El Aston Villa reacciona, pero el Liverpool acaba sentenciando
Consciente de que ya poco tenía que perder, el Aston Villa decidió dar un nuevo paso al frente tras el descanso. Su valentía y firme voluntad por recortar distancias provocó que el partido se abriese por completo y que el balón comenzase a circular de un lado a otro con enorme velocidad. Unos y otros fueron sumando llegadas, algunas de ellas muy claras, pero no fue hasta casi completado el primer cuarto de hora de la reanudación cuando el balón alcanzó la red. En el 59, tras un despeje defectuoso de Van Dijk, Douglas Luiz puso un centro al corazón del área y Ollie Watkins, con un certero cabezazo, subió el 1-2 al luminoso.
Tras meterse de nuevo en el partido, el Villa siguió asumiendo riesgos en busca del empate. Los de Emery decidieron jugar un poco a cara y cruz y en una de las cada vez más insistentes contras del Liverpool, la moneda cayó del lado indeseado. El joven Stefan Bajcetic, que acababa de saltar al campo, acompañó una rápida acción de los suyos y aprovechó un rechace para firmar su primer tanto en la Premier y certificar la victoria de los reds.
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El 1-3 final es el fiel reflejo de un duelo en el que ambos equipos mostraron una actitud valiente y ofensiva, pero en el que acabó imponiéndose la mayor pegada de un cuadro de Anfield Road que ha regresado del parón con la idea de acercarse lo antes posible a los primeros puestos de la tabla.
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