Un gol de Aitor Paredes a cinco minutos del 90 permitió al Athletic Club sumar un valioso empate en su estreno europeo ante la AS Roma. Los rojiblancos firmaron un partido bastante gris, pero supieron sacar partido de la desidia de un cuadro local que creyó que con el 1-0, obra de Artem Dobvyk, le iba a bastar para llevarse la victoria.
Seis años y medio después, el Athletic Club regresaba esta noche a una Europa League en la que, antaño, firmó varias jornadas para el recuerdo. Y lo hacía, además, con la motivación extra de saber que la final de la presente edición se disputará en San Mamés. En el estreno, los vascos debían medirse a una AS Roma que, tras un mal inicio de curso que se ha llevado por delante a Daniele de Rossi, trata de recuperarse de la mano del técnico croata Ivan Juric.
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Lejos de dejarse amilanar por el imponente aspecto del Olímpico, los rojiblancos encararon el duelo con valentía y durante los primeros 15 minutos lograron encajonar a su rival, gracias a su alta y eficaz presión y al rápido despliegue de sus hombres de ataque. A este excelente inicio solo le faltó el gol, pero ni Gorka Guruzeta ni Iñaki Williams ni Aitor Paredes lograron enviar entre palos tres remates bastante claros.
Superada esta fase, el cuadro italiano recuperó el pulso al partido y comenzó a meter miedo con varios envíos a la espalda de una zaga bilbaína que comenzó a mostrar ciertas carencias a la hora de tener que correr a campo abierto para parar a Artem Dobvyk y Paulo Dybala. De hecho, tras dos avisos, Angeliño entró sin problemas por la izquierda, ganando la partida a un despistado Andoni Gorosabel, y puso un centro medido que el citado Dobvyk cabeceó a la red sin oposición (minuto 32).
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El tanto desconcertó por completo al Athletic, que ya no volvió a dar señales de vida en ataque, salvo en una falta mal golpeada por Álvaro Djaló. Afortunadamente, los romanos tampoco se empeñaron en hacer sangre con más envíos en largo y el partido fue corriendo hasta el descanso sin dar pie a más acciones reseñables.
La Roma se conforma, el Athletic empata
Poco cambió el guion tras el descanso. Entre otras cosas, porque los vascos, incompresiblemente, desestimaron el plan inicial que tan esperanzadores resultados había dado y se empeñaron en mantener ese ritmo bajo y un tanto apático con el que habían despedido el primer acto. Además, Ernesto Valverde no se atrevió a introducir ninguno de los cambios que venía pidiendo su equipo y el partido fue avanzando de forma plácida para una Roma que hasta pudo sumar el 2-0 tras un inoportuno traspiés de Paredes que al final acabó subsanando Agirrezabala.
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A pesar de lo corto del marcador y de esa cierta flojera defensiva que denotaba el Athletic, la Roma no se esforzó mucho por buscar un segundo tanto que dejase el partido visto para sentencia y el partido fue avanzando sin pena ni gloria hacia su fase final entre la candidez de unos y el desinterés de los otros.
Curiosamente, a falta de 5 minutos para el 90, y cuando ya nada hacia sospechar un cambio en el luminoso, los rojiblancos botaron una falta desde la izquierda y Paredes, tras un primer toque de Unai Núñez, cabeceó el balón a la red. El tanto premiaba la, al menos, capacidad de los vascos para no bajar los brazos y, sobre todo, castigaba la desidia de un cuadro local que se había dedicado a sestear durante todo el segundo acto.
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Aunque trataron de reaccionar en el tiempo de prolongación, los locales fueron ya incapaces de superar a un ordenado Athletic que, de este modo, comenzó su tránsito europeo con un empate que, visto lo visto, puede y debe darse por mucho más que bueno. Ahora, toca darle mayor valor con una victoria en San Mamés ante el AZ.
Así queda la clasificación tras la disputa de la primera jornada.
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