FC Barcelona | El partido que puede cambiar el futuro de Joao Félix
Retirado en el descanso del duelo que ayer midió a FC Barcelona y Almería, el portugués Joao Félix ha comenzado a dilapidar el crédito que se había ganado en sus primeros duelos como azulgrana. Si sigue por este camino, es probable que la entidad culé se replantee la idea de contratarle definitivamente al término del curso.
Ayer, el FC Barcelona cosechó una agónica victoria ante el Almería, colista de Primera División. Los azulgranas firmaron una actuación bastante pobre y no pudieron superar a su rival hasta los últimos compases de un partido que dejó en mal lugar a un futbolista que, no hace tanto, parecía indispensable: el portugués Joao Félix.
El atacante, que ya venía dando síntomas de cierta falta de tensión en los duelos previos, volvió a mostrar su peor cara y fue retirado al descanso por, entre otras cosas, mostrar una tremenda pasividad en la jugada que acabó en el 1-1 del Almería. Aunque no quiso señalar a ninguno de sus pupilos, parece claro que a Xavi Hernández no le gustó nada la actitud de un futbolista al que sustituyó por Ferran Torres tras el paso por vestuarios. "No podemos apuntar a un jugador. Ha sido en general. La intensidad en la primera parte y la segunda no tiene nada que ver", reconoció el egarense en sala de prensa.
Futuro en el aire
Hasta ahora, los diversos estamentos del club catalán han exhibido siempre una firme disposición a adquirir al luso de forma definitiva. Sin embargo, tras este duelo, es muy probable que cojan fuerza las voces de quienes no terminan de ver clara la idea de negociar su fichaje con el Atlético de Madrid. "João vuelve a estar bajo sospecha", espeta el diario As.
Por ahora, Félix ha sumado seis goles y tres asistencias en 20 partidos oficiales, cifras aceptables, pero tal vez insuficientes para justificar un gasto elevado. Eso sí, con la temporada aún rondando el ecuador, parece claro que el de Viseu dispone del tiempo necesario para recuperar el paso y dar la razón a quien, desde el principio, ha sido su gran valedor, el presidente culé Joan Laporta.
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